Cómo vender tu negocio y no morir en el intento
Publicado el 08-10-2015¿No eres un buen negociador o te cuesta hacer un estudio de mercado? Hoy, la empresa líder de compraventa de negocios y empresas en España, Bizalia, nos trae la solución. En este artículo, nos contará las claves y consejos que debemos tener en cuenta a la hora de vender nuestro negocio con éxito para seguir avanzando hacia nuestras metas profesionales. ¡Atentos!
A la hora de vender tu negocio existen motivos para pensar que se puede fracasar, pero también hay muchas acciones que pueden evitarlo. En el mundo hay todo tipo de emprendedores, aquellos que aguantan su negocio hasta el día de su jubilación, otros que les gusta iniciar un proyecto nuevo tras otro y también hay emprendedores con ideas potentes pero en busca de compradores, sea cual sea tu motivo, ¡ha llegado la hora de vender tu negocio!
Para evitar el fracaso y vender tu negocio al mejor precio hay que seguir las tres reglas de oro: analizar, planificar y ejecutar.
Paso 1. Analizar
El análisis incluye varios pasos a tener en cuenta. En primer lugar, el timing. Es de importancia vital escoger bien el momento en el que vamos a sacar al mercado nuestra empresa. El valor de una empresa es variable según si es una startup con toda una vida por delante, o una compañía consolidada.
También es importante hacer un poco de estudio de mercado de las empresas en actividades parecidas a la tuya. Tendrás que tener claro cuánto deseas recibir por tu negocio, no puedes decir una cifra al azar. Al igual que en la inmobiliaria, las empresas también hay que valorarlas. Por eso, se recomienda acudir a asesores de adquisición o profesionales que te puedan ayudar a valorar tu empresa de forma objetiva.
Por último, no debemos descartar la opción de valorar a nuestros proveedores y clientes como potenciales compradores, en el caso de que no encontremos al comprador idóneo entre nuestra competencia.
Paso 2. Planificar
También en la planificación, el timing es esencial. La venta de una empresa no se hace en un día, lleva varios meses, a veces incluso años. Este proceso conlleva un gran trabajo de planificación.
Tendrás que recopilar toda la documentación financiera de tu negocio (por ejemplo, el balance general y las cuentas de resultados), calcular la rentabilidad, tener en orden todas las líneas abiertas de crédito, en definitiva, disponer de un dossier de venta preparado donde expliques a los interesados qué es tu empresa, cuál es su actividad, su trayectoria y sus puntos fuertes, aportando además una valoración de esta.
Paso 3. Ejecutar
Una vez hemos encontrado el candidato perfecto para la compra de nuestro negocio se ponen en marcha los procesos de negociación.
Pero, ¡ojo! antes de dar más información al comprador tendrá que firmar una carta de confidencialidad. Cuando eso esté aclarado podemos entonces entregar el llamado memorando al comprador con todos los datos de nuestro negocio. A partir de este momento, es cuando empezamos a hablar de una negociación inicial, centrada básicamente en la valoración de la empresa: cuánto vale el negocio y cuánto están dispuestos a pagar.
La primera fase de negociaciones se cierra con la declaración de intenciones donde se reflejan los objetivos de la transacción: el precio, las partes intervinientes, condiciones y plazos.
Una vez concluido, podemos decir que el comprador ha mordido el anzuelo y pasamos a la fase de diligencias donde se especificarán las características legales más detalladas del negocio. Si esto es satisfactorio se puede proceder a la negociación final, que será plasmada en la firma del contrato.
Buenas prácticas
Antes de vender tu empresa, una buena práctica es hacer una lista de todos los puntos fuertes y débiles de tu negocio, así como las oportunidades y amenazas.
Cuando lo tenemos todo sobre papel las cosas se ven muchos más claras y podemos ver qué es lo que realmente va bien y lo que va mal. Asimismo, este análisis DAFO te permitirá ser más ingenioso en la venta de tu negocio, de manera que cuando llegue el momento en el que un comprador pregunte por las debilidades, estarás bien preparado para argumentar cada una de ellas y transformarla en oportunidades.
Por último, debes tener presente que no eres experto en vender un negocio y que si te aventuras a ello podrías cometer errores. La mejor opción, por eso, es contar con profesionales que resuelvan aspectos importantes como elaborar una estrategia, hacer un estudio de mercado y llevar a cabo procesos de negociación. De esta forma, evitarás dolores de cabeza y vender empresas te resultará pan comido.