79 grandes frases de Mario Benedetti sobre el amor y la vida

Publicado el 02-03-2018

Más de una vez me he levantado con ganas de demostrarle a las personas que me importan cuánto las amo.

Pero si me voy hacia un ámbito más amoroso, de encontrar a tu alma gemela, siempre intentamos demostrarle a esa persona indicada cuánto la amamos, cuánto significa para nosotros.

A veces te quedas sin palabras, sientes que no sabes cómo expresar tus sentimientos hacia esa persona pero, ¿por qué no refugiarte en ocasiones, en frases que lo hagan por ti?

Personalmente, siempre me identifico con una frase, siempre la llevo cerca de mi corazón y mente, e intento aplicarla o al menos expresarla.

Así como otras veces, decido simplemente decírselo a la persona que tanto me importa.

Es normal que no sepas qué decir o cómo expresarte para escoger las palabras adecuadas. Que no te dé miedo buscar una escritura, frase o simple palabra que demuestre tus sentimientos.

Mario Benedetti era sin duda un gran poeta y escritor. Sus frases y poemas siempre me llegaban al corazón y hoy día, cuando escribo esto, tienen aún más impacto en mí.

Me han ayudado a entender mejor lo que siento y expresar también de una forma clara y con todo mi corazón, cada sentimiento que tengo hacia las personas que he considerado especiales en algún momento.

Y así como entiendo mejor los míos, también los de otros.

Si no sabes cómo describir lo que sientes, cómo decirlo, te invito a leer estas 79 frases de Mario Benedetti que además de enseñarme a expresar mis sentimientos, me ayudaron a entender mejor el amor y la vida.

 

79 frases de Mario Benedetti para expresar tu amor

 

1. Y para estar total, completa, absolutamente enamorado, hay que tener plena conciencia de que uno también es querido, que uno también inspira amor.

2. Te quiero como para escuchar tu risa toda la noche y dormir en tu pecho, sin sombras ni fantasmas. Te quiero como para no soltarte jamás.

3. Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que sale del corazón.

4. Que alguien te haga sentir cosas sin ponerte un dedo encima, eso es de admirar.

 

 

5. La muerte es una aburrida experiencia; para los demás, sobre todo para los demás.

6. Esa felicidad con todas sus letras en mayúsculas no existe ¡Ah! Pero si fueran en minúsculas sería tan similar a lo que viene siendo nuestra pre-soledad.

7. Qué bueno que tengas el valor de ser distinto y no sucumbas al poder unánime.

8. Nacemos tristes y morimos tristes, pero en el entretiempo amamos cuerpos cuya triste belleza es un milagro.

 

 

9. Defender la alegría como una trinchera, defenderla del escándalo y la rutina, de la miseria y los miserables, de las ausencias transitorias y las definitivas.

10. Un pesimista es solo un optimista bien informado.

11. Cada vez que te enamores no expliques a nadie nada, deja que el amor te invada sin entrar en pormenores.

12. Cinco minutos son suficientes para vivir una vida entera, así de relativo es el tiempo. 

 

 

13. Algunas cosas del pasado desaparecieron, pero otras abren una brecha al futuro y son las que quiero rescatar.

14. Todos necesitamos alguna vez un cómplice, alguien que nos ayude a usar el corazón.

15. Lo que uno quiere de verdad, es lo que está hecho para uno; entonces hay que tomarlo, o intentar. En eso se te puede ir la vida, pero es una vida mucho mejor.

16. Ella no decía nada. Le gustaba que él le dijera cosas, pero ella callaba. Solo sus manos y sus ojos hablaban y eso bastaba.

 

 

17. Pedir perdón es humillante y no arregla nada. La solución no es pedir perdón, sino evitar los estallidos que hacen obligatorias las excusas.

18. Si uno conociera lo que tiene con tanta claridad como conoce lo que le falta.

19. A veces me siento infeliz sin un motivo concreto.

20. Todos queremos lo que no se puede, somos fanáticos de lo prohibido.

 

 

21. Cuando los odios andan sueltos, uno ama en defensa propia.

22. Sé que voy a quererte sin preguntas, sé que voy a quererte sin respuestas.

23. Es claro que lo mejor no es la caricia en si misma, sino su continuación.

24. La realidad es un manojo de problemas sobre los cuales nadie reclama derechos de autor.

 

 

25. El amor es una palabra, un pedacito de utopía.

26. Me gusta el viento, no sé por qué, pero cuando camino contra el viento parece que me borra cosas. Quiero decir: cosas que quiero borrar.

27. No hay que prometer nada porque las promesas son horribles ataduras, y cuando uno se siente amarrado, tiende a liberarse, eso es fatal.

28. También siento un leve resquemor frente a lo cursi, y a mi lo cursi me parece justamente eso: andar siempre con el corazón en la mano.

 

29. No te rindas, por favor no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda, y se calle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños.

30. Nos resignamos al momento único y feliz. Preferimos perderlo, dejarlo transcurrir sin siquiera hacer el razonable intento de asirlo. 

31. Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad.

32. La mariposa recordará por siempre que fue gusano.

 

 

33. La perfección es una pulida colección de errores.

34. El amor no es repetición. Cada acto de amor es un ciclo en sí mismo, una órbita cerrada en su propio ritual. Es, cómo podría explicarte, un puño de vida.

35. La incertidumbre es una margarita cuyos pétalos no se terminan jamás de deshojar

36. Lo cierto es que yo ignoraba que tenía en mí esas reservas de ternura.

 

 

37. Se despidieron y en el adiós ya estaba la bienvenida.

38. En realidad, sólo existe la dirección que tomamos, lo que puede haber sido ya no vale.

39. Yo amo, tú amas, el ama, nosotros amamos, vosotros amáis, ellos aman. Ojalá no fuese conjugación sino realidad

40. Y aunque no siempre he entendido mis culpas y fracasos, en cambio sé que en tus brazos el mundo tiene sentido.

 

 

41. De pronto nos sentimos prisioneros de una circunstancia que no buscamos, sino que nos buscó.

42. Después de la alegría viene la soledad, después de la plenitud, viene la soledad, después del amor viene la soledad. 

43. Tus ojos son mi conjuro contra la mala jornada.

44. Una de las cosas más agradables de la vida: ver cómo se filtra el sol sobre las hojas.

 

 

45. Que el mundo y yo te queremos de veras, pero yo siempre un poquito más que el mundo.

46. Quién lo diría, los débiles de veras nunca se rinden.

47. Yo no quiero que me vendan sueños ajenos, sino sencillamente que se cumplan los míos.

48. Quizá mi única noción de patria sea esta urgencia de decir “nosotros”, quizá mi única noción de patria sea este regreso al propio desconcierto.

 

 

49. No sé por qué, pero hoy me ha dado por extrañarte, por echar de menos tu presencia. Alguien me dijo que el olvido está lleno de memoria.

50. Te espero cuando miremos al cielo de noche: tú allá, yo aquí.

51. En realidad, sólo existe la dirección que tomamos, lo que puede haber sido ya no vale

52. Mi estrategia es que un día no sé cómo ni sé con qué pretexto, por fin me necesites.

 

 

53. Te he dejado pensando en muchas cosas, pero ojalá pienses un poco en mí.

54. Sus labios eran una caricia necesaria, cómo podía haber vivido hasta ahora sin ellos.

55. Hay menos tiempo que lugar, no obstante, hay lugares que duran un minuto y para cierto tiempo no hay lugar.

56. No sé tu nombre, sólo sé la mirada con que me lo dices.

 

 

57. Porque tú siempre existes dondequiera, pero existes mejor donde te quiero.

58. En este mundo tan codificado con internet y otras navegaciones, yo sigo prefiriendo el viejo beso artesanal que desde siempre comunica tanto.

59. Así estamos, cada uno en su orilla, sin odiarnos, sin amarnos, ajenos.

60. No me tientes, que si nos tentamos no nos podremos olvidar.

 

 

61. Lo que más me gusta de vos es algo que no habrá tiempo capaz de quitártelo.

62. Más que sus ojos, su mirada. Miraba como queriendo decir algo y no diciéndolo.

63. Honestidad, ven a mí y aunque quieras no dejaré que me abandones.

64. Te espero cuando la noche se haga día, suspiros de esperanzas ya perdidas. No creo que vengas, lo sé.

 

 

65. Sin embargo, todavía dudo de esta buena suerte, porque el cielo de tenerte me parece fantasía.

66. De todas aquellas manos, la suya era la única que me transmitía la vida.

67. Contra el optimismo no hay vacunas.

68. Si habito en tu memoria no estaré solo. 

 

69. El plan trazado es la absoluta libertad. Conocernos y ver que pasa, dejar que corra el tiempo y revisar. No hay trabas. No hay compromisos.

70. Ojalá que la espera no desgaste mis sueños.

71. Fíjese que cuando sonríe se le forman unas comillas en cada extremo de la boca. Esa, su boca, es mi cita.

72. Ya casi es hora de que empiece a dedicarte mi insomnio.

 

 

73. Se es o no se es, no importa el día.

74. Que el dolor no me apague la rabia, que la alegría no desarme mi amor.

75. Lo nuestro es ese indefinido vínculo que ahora nos unes.

 

 

76. Que te quede bien claro. Donde acaba tu boca, ahí empieza la mía.

77. Mi estilo de querer es ese, un poco reticente, reservando el máximo solo para grandes ocasiones.

78. Lo perdido tuvo color, pero ahora es incoloro. Los latidos del gastado corazón invaden nuestra noche, pero el insomnio actual tiene otra partitura. Lo perdido es también un par o dos de labios que probaron el sabor de los míos, y que ahora tan sólo puedo besar en mi memoria.

79. Yo quisiera ser yo, pero un poco mejor.

 

 

¿Cuál de estas frases de Mario Benedetti es tu preferida? Déjame un comentario aquí abajo y cuéntamelo.