9 pasos que uso para eliminar mis pensamientos negativos
Publicado el 23-11-2015Todos tenemos la habilidad de crear nuestra propia realidad. La mayoría de veces, podemos mirar a una situación y ver lo bueno que hay en ella, o ver la misma situación y elegir sólo mirar el lado malo que tiene.
En muchas ocasiones, la lupa con la que miramos a nuestro alrededor está determinada por nuestros pensamientos.
Los pensamientos positivos crean circunstancias positivas. Pero los pensamientos negativos sólo contribuyen a que tengamos insatisfacción y decepción.
Por eso es esencial cambiar esos pensamientos negativos para conseguir felicidad y paz dentro de nosotros mismos.
La peor época de mi vida
Te voy a contar algo: yo no he sido siempre la persona alegre y motivada que lees en estos artículos de Gananci.
Si has seguido algunos de mis posts, verás que he mencionado varias veces que antes de convertirme en emprendedor trabajaba para un jefe dentro de una empresa.
Esa fue probablemente la peor época de mi vida: mi trabajo empezó a no gustarme porque no me apasionaba; y ese pensamiento negativo se extendió a todo lo demás que me rodeaba.
Lo que empezó con un “ya no me gusta mi trabajo“, acabó por hacerme pensar que odiaba mi oficina, que mis compañeros hablaban mal de mí a mis espaldas (cosa que luego descubrí que no era cierta).
Y lo que es peor: invadió mi propia vida personal.
Me levantaba sintiendo que no había salida, que nunca tendría más opciones. Apenas salía los fines de semana porque pensaba “¿para qué salir? El lunes tendré que volver a la misma situación de todas las semanas que tanto odio”.
Con todo esto lo que te quiero decir es que un pensamiento negativo es como un virus: si no lo paras a tiempo, puede extenderse por todo tu cuerpo y hacerte sentir que tu vida es miserable.
Por eso hoy quiero enseñarte los 10 pasos que yo utilizo para cambiar mis pensamientos negativos por creencias positivas, y aprovecharlas para mejorar la situación en la que te encuentres.
Los 10 pasos que yo uso para cambiar mis pensamientos negativos
1. Aléjate del pensamiento de “todo o nada”
Cuando caemos en el pensamiento de “todo o nada”, vemos nuestras circunstancias en blanco o negro, pero nunca nos damos cuenta de lo que hay en medio.
Si cambias tu perspectiva, y miras tanto lo bueno como lo malo, comprobarás que hay un nuevo punto de vista que se crea y que te ayudará a darte cuenta de que existen otras opciones.
En la vida no existen situaciones sin salida, siempre hay alternativas que podemos tomar.
Y para llevar una vida emocionalmente sana, es necesario que nuestros sentimientos estén equilibrados.
Palabras como siempre, nunca, imposible, terrible y perfecto son rígidas y dejan muy poco espacio para otras opciones. Al decirlas o pensarlas, estarás levantando un muro mental que te impedirá conseguir cosas que en realidad sí puedes alcanzar.
En cambio, si miras el punto medio, encontrarás una tercera puerta que está esperándote llena de oportunidades.
Te propongo un ejercicio: cada vez que pienses una frase negativa en donde aparezca alguna palabra como las de arriba, trata de darle la vuelta para hacerla positiva y buscar un balance.
No puedo hacerlo —> Sí puedo hacerlo aunque cometa errores
Nunca hay nada bueno en mi vida —> Mi vida tiene cosas malas, pero hay muchas más que son buenas
Soy un tonto, no hago nada bien —> Soy una persona inteligente aunque a veces haga algo tonto
Lo importante en todas esas frases es que hay un equilibrio en ellas. No existe el negro ni el blanco, sino el gris que está en medio y que te permite ver todas las posibilidades reales que existen.
Recuerda que tus palabras crean tu mente, y por eso es importante hablar en forma positiva si deseas triunfar y ser feliz.
2. Evita la tentación de generalizar
La generalización es un tipo de pensamiento negativo en el que creemos que si pasa una cosa mala, todo lo demás está condenado a ser de la misma manera.
Piensa en esta generalización como exageraciones.
Nunca me escuchas. Él siempre me interrumpe. Todo el mundo piensa que soy estúpido.
¿Ves que aquí vuelven a aparecer palabras como nunca, siempre, o todo el mundo?
La generalización puede hacerte mucho daño porque gran parte de ello es mentira. Por eso debes reconsiderar tus palabras y tus circunstancias.
Intenta encontrar algo positivo.
Igual que en el anterior punto, lo mejor es que cambies esas frases para darles la vuelta.
De esa forma, analizarás mejor la realidad y verás que nada es tan exagerado como tú piensas; quizás haya una parte negativa, pero la mayoría de la situación será positiva.
3. ¿Prefieres tener razón o ser feliz?
Puedo ser muy cabezota. A veces mi testarudez me ha costado muchas cosas. Me ha costado la oportunidad de perder una aceptación de disculpa o considerar un punto de vista diferente.
Estaba empeñado en tener más razón que en ser feliz.
Pero lo que antes no sabía es que querer tener razón sólo lleva a más pensamientos negativos, porque nos negamos a olvidar cuál era el problema por el que estábamos discutiendo.
Querer estar en lo correcto sólo lleva a discutir más, y a más pensamientos negativos.
Yo tengo razón, él es demasiado estúpido para verlo. No quiero volver a hablar con él nunca.
Sin embargo, para encontrar paz dentro de ti, y ser feliz, a veces debes dejar pasar estas situaciones, olvidarte del problema, y seguir adelante.
4. Cambia tu filtro mental
El pesimismo puede convertise en una costumbre si no tienes cuidado. Si dejas que este tipo de pensamiento te engulla, empezarás a ver el mundo de otra manera.
El vaso siempre estará medio vacío para ti.
La mejor manera de empezar a cambiar tu filtro mental es permitiendo que los pensamientos positivos sobrepasen a los negativos.
Intenta ver el lado bueno de las cosas en cada ocasión.
Una larga cola en el supermercado puede ser una estupenda oportunidad para hablar un poco con la persona que te acompaña a comprar, o para revisar algunos de tus correos en tu celular.
Un despido del trabajo puede ser el momento perfecto para buscar otro empleo que te llene más, o emprender ese negocio con el que siempre soñaste.
La frase “si la vida te da limones, haz limonada” es un buen ejemplo para hacerte ver que todo depende de los ojos con los que mires, y lo importante que es saber transformar algo negativo en positivo.
5. No hagas conclusiones precipitadas
Cuando te enfrentes a lo que puede ser una circunstancia inesperada, respira hondo, da un paso atrás, y mira la situación en su conjunto para tener toda la información completa.
En mi casa, mis padres siempre usaban conmigo la frase “¿y cuál es el resto de la historia?“.
Cuando yo llegaba culpando a la profesora porque había suspendido un examen en la escuela, ellos siempre me hacían esa pregunta. Y al final descubrían que el problema solía ser que no había estudiado suficiente para aprobar.
Lo que quiero decirte con esto es que ellos nunca saltaban a conclusiones precipitadas sin tener antes toda la información para ver si lo que yo contaba era verdad, o en realidad, faltaba parte de la historia.
Antes de pensar “voy a fracasar” o “mi vida está destruida” párate, respira hondo, y analiza si hay alguna parte de verdad en eso.
¿Tienes hijos, una pareja o unos padres que te quieren? Entonces tu vida no es tan miserable como crees.
Puede que no tengas trabajo ni dinero, pero tienes la opción de buscar una fuente de ingresos por muchos medios, y hacerlo al lado de personas que te quieren y te apoyan.
La claridad que se gana cuando no se hacen conclusiones precipitadas nos da el poder de pensar de una manera más racional y reaccionar positivamente.
6. Nunca te digas “debería”
Cuando empleamos la palabra “debería” en nosotros mismos, en realidad estamos juzgándonos de manera negativa sobre nuestras acciones y nuestros comportamientos.
Debería ser un mejor padre; debería ganar más dinero y debería ser más feliz.
Al decirnos “debería” estamos dando por hecho que nuestro estado actual no es suficientemente bueno, y estos son pensamientos negativos que nos impiden ver lo positivo que hay en nosotros.
Los “debería” meten nuestras actitudes y comportamientos en una caja y no nos dejan ver otras soluciones.
Así que borra esta palabra de tu vocabulario. Empieza a utilizarla lo menos posible, porque aunque no lo creas, seguramente esa palabra sea la fuente de tus frustraciones y decepciones contigo mismo.
Puedes ser un buen padre, pero no necesitas ser perfecto.
Puedes ganar dinero para mantener a tu familia, y tener el deseo de generar más ingresos.
Y puedes ser feliz con todo lo que tienes, y seguir buscando formas de traer más felicidad a tu vida.
7. Intenta no tomártelo de forma personal
Voy a decirte una cosa y puede que sea duro para ti, pero es la verdad.
No todo gira alrededor tuyo.
El miedo, la paranoia e incluso la inseguridad nos llevan a creer que la forma en que otros reaccionan, o las cosas que dicen, siempre están dirigidas hacia nosotros.
Pero no es así; a veces las personas tienen un mal día, pero en realidad no tienen nada en contra de nosotros.
Uno de mis mayores retos es cuando alguien hace un comentario negativo sobre uno de mis proyectos. Intento siempre evitar la tentación de pensar que es algo en contra de mí.
La mayoría de veces, cuando alguien me dice esto, lo que pienso es que yo no soy bueno ni efectivo, y que por mi culpa mi proyecto tiene un fallo.
Y esa única idea se convierte en un mar de pensamientos negativos: quizás no valgo para ser emprendedor, puede que haya cometido más errores que no he visto, ¿y si todo fracasa por mi culpa?
Mi tarea para solucionarlo es cambiar esas ideas que no son ciertas por otras más positivas y motivadoras. Y dejar de pensar que eso es un ataque personal, porque en realidad sólo es un comentario que seguramente no tenga ninguna importancia.
8. No agrandes tus problemas
Una cosa es la percepción y otra la realidad. Y los pensamientos negativos empiezan a crearse cuando confundimos las dos.
Ver una situación como realmente es, en vez de lo que parece que es, te ayudará mucho para seguir adelante.
Agrandar un problema sólo hará que le des más importancia de la que tiene y se convertirá en algo peor de lo que era al principio.
Uno de mis primeros negocios fracasó; pero cuando lo hizo, no aumenté el problema pensando que todos mis siguientes negocios iban a fracasar también, que yo estaba acabado, y que no había ninguna otra solución.
En vez de eso, miré la situación tal y como era.
Sí, perdí dinero en arrancarlo, pero busqué soluciones para comenzar otro proyecto sin apenas dinero, y aprendí de los errores que había cometido en el anterior para no volver a caer en ellos.
Traté de manejar la situación con los hechos, no con la percepción y las ideas falsas que se pasaban por mi cabeza, y no permití que los pensamientos negativos me vencieran la batalla.
9. ¡Celébralo!
Celebra las cosas buenas cuando te pasen. No dejes pasar tus victorias o las hagas más pequeñas.
Habrá días en los que te encuentres un par de obstáculos. Otros te parecerá que alguien ha vaciado tu corazón de la pasión y la fuerza que necesitas para la vida.
Así que los días buenos en los que te pasen cosas positivas, no importa lo pequeñas o insignificantes que te parezcan, date a ti mismo el tiempo para disfrutarlas y dejar que te llenen de alegría.
Lo que piense tu mente, lo atraes a tu vida. Y los pensamientos positivos y la felicidad crean más positividad y alegría.
¿Cuáles son los peores pensamientos negativos que tú tienes? Dime tus técnicas para eliminarlos y comparte este post en tus redes sociales.
Me gustan mucho tus artículos. Quiero felicitarte por tu esfuerzo que pones en ellos. Y por compartirlos con los demas.
Los comentarios como el tuyo son los que me motivan a seguir escribiendo, gracias amigo!!
Hola Andres
Me identifique completamente con tu articulo al igual que tu, yo también tuve un episodio en mi vida de desesperanza y pensamientos negativos que me mantuvieron 5 valiosos años de mi vida en un trabajo poco cualificado que no me hacia feliz, haciendo un esfuerzo todos los días para ir a trabajar algo que se convierte en un infierno, hasta que conocí a alguien con una actitud y una forma de ver las cosas que me cambio la vida y me enseño a valorar el conocimiento y la lectura, por lo tanto tome la decisión de dejar atrás ese empleo y estudiar economía y finanzas, lo que me abrió la mente con respecto al funcionamiento del dinero y actualmente estoy desarrollando mi primer emprendimiento. Realmente he comprobado que siempre hay una salida y todo esta en la mente y la forma en que veas las cosas.
Muy buen articulo.
Qué bueno José, la tuya es una historia realmente inspiradora y que motivará a muchísimas personas que la lean. Estoy totalmente de acuerdo contigo en que siempre hay una salida y todo depende de los ojos con los que veamos nuestros problemas, y nuestras alegrías. ¡Hace falta más gente como tú en el mundo! Gracias amigo por compartir tu historia 🙂
Muy buen artículo! Mientras lo iba leyendo me sentía identificada paso por paso con cada una de esas actitudes negativas en las que he incurrido en varias ocasiones en mi vida, y me reía mentalmente porque es como si me estuvieran describiendo. Es verdad que a veces la tentación de pensar negativamente se posa como una mosca sobre nosotros, pero este artículo es muy bueno para espantarla, y me hizo recordar otros textos también muy buenos que he leído relacionados con el tema. Muchas gracias!!!
Mil gracias! Tienes mucha razón con eso de que los pensamientos negativos a veces son como una mosca, pero lo importante es tener la voluntad para querer espantarla!
hola andres soy venezolana y en estos momentos estoy pasando por una situacion dificil economica me puedes explicar como gano dinero haciendo encuestas pero que sean gratis sin invertir porque no tengo para invertir me puedes agregar facebook me encuentras thais diaz
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