Cómo encontrar tiempo cuando tu trabajo no te deja vivir

Publicado el 17-03-2017

Todos tenemos la misma cantidad de horas en un día. Da igual dónde vivas, en lo que trabajes, la edad que tengas, o el dinero que haya en tu cuenta.

Pero seguro que conoces a alguien que cada vez que habla contigo hace que te deprimas.

Quizás sea ese típico compañero de trabajo que cada día en la oficina te cuenta que le da tiempo a trabajar, ir al gimnasio, recoger a sus hijos, ver una película en el cine con su mujer, y además preparar las mejores presentaciones para el jefe.

O puede que quien te haga preguntarte qué haces con tu tiempo sea tu mejor amiga, esa que hace poco se ha convertido en emprendedora y dirige un negocio ella solita, y además le sobran horas para ir a pilates y lucir siempre como una diva de Hollywood.

En cambio tú ¿para qué tienes tiempo a lo largo del día? Para ir a trabajar, comer rápidamente, volver a casa, y ver un rato la televisión mientras cenas antes de irte a dormir de nuevo.

No sabes cómo encontrar tiempo para hacer lo que realmente quieres, y lo que es aún peor: crees que es imposible encontrarlo.

La gente que hace tantas cosas en un mismo día deben de tener algún secreto oculto que tú aún no conoces; quizás han hecho un pacto con el diablo y no son iguales que el resto de los mortales… 🙂

Pero sabes bien que la vida no es una película, y que el verdadero motivo por el que ellos estiran sus horas como si fueran un chicle es porque saben organizarse mejor que tú.

Te dolerá reconocerlo, pero la razón más lógica es esa. Y no te equivocas.

Ahora lo que estarás deseando saber es cómo lo hacen ellos para gestionar su tiempo con tanta eficacia, y que tú puedas por fin responderles “a mí también me da tiempo a hacerlo todo” cuando te cuentan sus batallitas.

Enhorabuena, porque estás en el sitio indicado para lograrlo.

Aquí voy a compartirte los 6 pasos que yo utilizo para encontrar tiempo suficiente para mí y para todas las cosas que debo hacer cada día, y cómo tú también puedes conseguir la libertad para hacer todo lo que deseas.

 

Cómo encontrar tiempo para hacer todo lo que quieres en tu vida

 

1. ¿Qué es lo que realmente quieres hacer con tu tiempo?

Esta es la primera pregunta – y la más importante – que debes hacerte.

No te imaginas la cantidad de amigos que al hablar con ellos me dicen que apenas tienen tiempo para nada, y cuando les pregunto qué harían si tuviesen dos horas más libres al día, se quedan callados porque no saben qué contestar.

Así que dime, ¿qué es lo que tú quieres hacer con tu tiempo? No debes pensar en objetivos a largo plazo como construirte una casa al lado de la playa dentro de 5 años.

Tienen que ser cosas que quieras hacer AHORA, a corto plazo.

Toma un papel y un lápiz, y apúntalas todas ahí. Da igual que sea ir a clases de inglés, salir más a pasear, o tener más tiempo para preparar tus comidas. Escríbelas todas.

Las metas que no escribes en un papel son mucho más difíciles de alcanzar porque, si sólo están en tu cabeza, puedes olvidarlas fácilmente, o incluso distraerte con otros objetivos y no cumplirlos nunca.

En cambio, escritas en un papel podrás verlas cada vez que quieras, y estarán ahí mirándote a ti esperando a que las cumplas.

Recuerda que el tiempo es el recurso más valioso que tienes; y es importante que sepas exactamente qué quieres hacer con el tiempo limitado que tienes en este mundo.

 

 

2. Crea un plan detallado para conseguir esas metas

Sólo con tener objetivos no vas a hacer que mágicamente aparezcan más minutos en tu vida. Necesitas crear un plan específico y detallado para alcanzarlos.

Sin esto, es fácil que te distraigas de tus metas y a mitad del camino las abandones. Pero cuando tienes un plan como referencia al que mirar, es mucho más fácil llegar a tu destino.

Este “mapa” te dará una dirección a la que ir, una motivación para seguir adelante, y podrás comprobar qué pasos has dado hasta el momento, y cuáles te faltan para llegar.

Para que te sea más fácil entenderlo, piensa durante un momento en un avión. Cuando tiene que hacer un viaje, se marca el objetivo de ir desde una ciudad a otra.

Y además su meta es llegar a esa otra ciudad en un día concreto y a una hora específica. El piloto que lo conduce sabe lo que quiere, y a dónde debe ir.

Pero para lograrlo con éxito, tiene que hacer un plan de viaje, y conocer la velocidad a la que debe ir el avión, si va a necesitar pararse para repostar o no, y cuánto tiempo le llevará eso.

Y al igual que un avión y su piloto necesitan ese plan, tú también debes tenerlo para llegar a tu destino. Las cosas no van a pasar sólo soñando con ellas.

Tienes que pasar a la acción para conseguirlas, y organizar bien todos los pasos que darás para llegar hasta ese fin.

 

 

3. Realiza un registro de tu tiempo

Está claro que no podrás encontrar el tiempo que necesitas para hacer todo lo que quieres si no sabes en qué se te van los minutos preciados con los que cuentas.

Pregúntate en qué estás gastando tu tiempo ahora, y realiza un registro de todo lo que haces durante cada día.

Escribe en un papel lo que haces a cada hora durante una semana, incluyendo también el sábado y el domingo.

De este modo, verás los momentos del día exactos que tienes libres para completar otras tareas. Cuando termines la semana, analiza todo lo que has apuntado.

¿Cuánto tiempo has malgastado haciendo cosas como ver la televisión o dormir la siesta que en realidad no te aportan nada valioso? ¿Tuviste que atender alguna urgencia porque no supiste administrar bien tu tiempo?

Con preguntas como esas descubrirás a dónde se van la mayoría de tus horas desperdiciadas, y podrás darte cuenta de qué hábitos son los más negativos para organizarte correctamente en tu día a día.

 

 

4. Aprende a jerarquizar

Ya sabes qué tareas tienes que hacer: ahora debes clasificar cuáles son las más importantes.

Es necesario aprender a jerarquizar tus tareas. Después de escribir todo lo que debes hacer en un papel, califícalas por orden de importancia, y ejecútalas una a una, nunca más a la vez.

Realiza primero lo más prioritario, necesario y que no puedas aplazar, pero evita convertir esas actividades en algo urgente (así sólo te traerá más estrés y ansiedad a tu vida).

Es sorprendente la gente que revisa sus correos electrónicos, miran el periódico, comprueban su Facebook y ven vídeos en YouTube antes de hacer lo que es más importante.

Y claro, al final, nunca terminan haciendo nada porque no saben bloquear esas distracciones.

 

 

5. Evita las distracciones que más te perjudican

Ver un vídeo en YouTube, mirar las actualizaciones de Facebook, revisar si nos han mandado un nuevo mensaje por WhatsApp…

A diario estamos rodeados de distracciones, y siempre prometemos que sólo les vamos a dedicar 5 minutos.

“Mi youtuber favorito acaba de subir un vídeo: voy a verlo y después sigo con lo que estaba haciendo“.

El problema es que ese ratito de 5 minutos para ver un vídeo se suele convertir en una, dos, tres horas de distracciones…

Así que evita ese tipo de distracciones, porque no te van a ayudar a finalizar las actividades que tienes entre manos.

Una nueva foto de un amigo en Facebook no te ayudará a terminar de limpiar y organizar tu armario de la ropa, ni contestar un mensaje de WhatsApp conseguirá que termines de hacer la comida antes.

 

 

6. Disfruta del momento que vives ahora

Encontrar tiempo para hacer lo que realmente deseas tiene mucho que ver con estar a gusto con lo que vives en el momento.

Si no disfrutas del aquí y el ahora, y sólo estás preocupado por terminar las cosas que debes hacer, llegará un momento en que no puedas y te “rompas”.

Te rendirás, y tirarás la toalla.

Tienes que cumplir con tus obligaciones y esforzarte por intentar cosas nuevas cada día; pero también es importante que te diviertas y estés contento con ello.

Y si lo único que haces es trabajar y forzarte cada vez más, llegará un momento en que tu propia mente te pida parar de todo eso y tomar un descanso.

Asegúrate de que entre todas esas actividades que quieres hacer haya algo que te motive, que te saque una sonrisa.

No olvides tampoco tomarte una pausa cuando lo necesites. Comparte tus proyectos con las personas a las que quieres. Sal a relajarte con tus amigos, con tu familia o con tu pareja.

Disfruta del presente. Agradece lo que tienes. Y vive el momento. Es la mejor manera de aprender cómo encontrar tiempo no sólo para ti, sino también para los que te rodean.